La Torre de los Homenajes todavía se eleva en su sitio, ascendente y aerodinámica, como un símbolo perdurable de las ansias de triunfo de la nación creadora que lo hiciera realidad.
El Álbum “Primer Campeonato Mundial de Football”, del que se publicaron 3.000 ejemplares una vez finalizado el encuentro deportivo, es un material fundamental para entender de primera mano cómo de desarrolló y se vivió el histórico torneo.
Espectadores de innumerables triunfos y derrotas, vieron a la Selección Uruguaya vencer en la Copa de Oro de Campeones Mundiales de 1980 y permanecían en sus puestos, aún, cuando la Celeste levantó la Copa América en los años 1983 y 1995.
La Primera Guerra Mundial, que se pensaba corta y destinada a “terminar con todas las guerras”, fue en cambio larga y sangrienta. Los cascos de acero creados por Inglaterra, Francia y Alemania continúan, en la memoria de aquel conflicto, como uno de sus símbolos más característicos.
La platería inglesa posee una característica especial: sus “hallmarks”, sellos estampados para certificar el contenido y calidad de los metales preciosos.
Hay, en las escenas delineadas por el artista, en las curvas de los vestidos y las hortensias, una búsqueda no solamente pictórica sino también poética.